En el juicio oral llevado adelante por el fiscal especializado en delitos violentos Francisco Almazán, se acreditó que el día de los hechos, aproximadamente a las 16:50 horas, el acusado Kevin Mena San Clemente, de nacionalidad colombiana, luego de agredir y ser agredido por desconocidos, llegó lesionado cerca de un inmueble de calle Genaro Gallo, comuna de Iquique. En ese lugar fue asistido por la víctima Miguel Gallardo Arellano, quien salía en ese momento de su domicilio.
La víctima le ofreció agua, ingresando ambos al interior de la habitación que Miguel Gallardo arrendaba. Una vez al interior, el acusado tomó un cuchillo y se abalanzó sobre el afectado, propinándole al menos 19 puñaladas su tórax, abdomen y extremidades, las que le causaron la muerte.
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Otros residentes trataron de reducir al acusado y quitarle el arma, sufriendo uno de ellos un golpe en su rostro que le provocó una herida nasal y observación de fractura. El imputado huyó de la casa y fue retenido por vecinos en un lugar cercano.
En el juicio la Fiscalía -junto a los abogados querellantes del Centro de víctimas de delitos violentos y la Delegación presidencial regional-, presentó los testimonios de las víctimas agredidas y de los vecinos que presenciaron los hechos; de los carabineros que llegaron al lugar deteniendo al imputado y de los funcionarios de la Brigada de Homicidios que realizaron las diligencias investigativas. También declararon los peritos del Servicio Médico Legal que confirmaron la causa de muerte de la víctima y las lesiones de los otros afectados.
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Así, el tribunal resolvió condenar al acusado a la pena de 15 años de presidio por el delito de homicidio, 7 años por el homicidio frustrado de la segunda víctima y 300 días de presidio por el delito de lesiones menos graves. Todas las penas deberá cumplirlas en forma efectiva.
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