El operativo, que se basó en información recopilada a través de plataformas de análisis y control de delitos, tuvo como objetivo aumentar la seguridad y reforzar los controles en áreas identificadas como focos de actividad delictiva.
De acuerdo a lo informado por el teniente coronel Luis Muñoz, subprefecto de los servicios, se llevaron a cabo un total de 907 fiscalizaciones, de las cuales 527 correspondieron a controles vehiculares, 368 a controles de identidad, además de siete inspecciones en locales de alcoholes y cinco en locales comerciales.
Publicidad
Las detenciones efectuadas durante el operativo se relacionan principalmente con órdenes de aprehensión vigentes, porte de arma blanca, robo por sorpresa, contrabando y conducción bajo los efectos de sustancias psicotrópicas.
"Este es un trabajo permanente que está realizando Carabineros de Tarapacá con la finalidad de poder acrecentar sus controles preventivos y disminuir los índices delictuales en la región", afirmó el oficial Muñoz, destacando el compromiso de la institución con la seguridad y el bienestar de la comunidad.


